Cuando dos grandes entrenadores se enfrentan en una final, cualquier cosa puede pasar.
El buen juego se repartió por mitades, en la primera Panathinaikos fue muy superior, y en la segunda, lo fue el CSKA.
Me encantan estos entrenadores, que a base de ser tan distintos cada vez se parecen más; por ejemplo, ambos técnicos, salieron de inicio sin sus mejores hombres, Jasikevicius (ya habitual este año) y Siskauskas que vieron el principio del partido desde el banquillo, para después utilizarlos como revulsivo y en función de las necesidades del partido.
Obradovic, hizo lo mismo que en la semifinal, puso a Spanoulis de base y dejó en el banquillo a Diamantidis, para ver las intenciones defensivas del rival y en función de esto sacar a Jasikevicius o al Griego, según se adapate el partido a las características de uno u de otro.
El inicio fue de Panathinaikos lo que hizo a Ettore Messina sacar muy pronto a Ramonas Siskauskas, que recibió una impresionante defensa, lo que le obligó a tirar de forma precipitada y a anotar sólo 2 puntos en la primera mitad.
Esto se unió al gran acierto de Spanoulis y Fotsis lo que hizo que se fueran en el marcador con ventajas de más de diez puntos. Entonces aparecieron Jasikevicius y Diamantidis en el partido, y la ventaja se fue hasta los 20 puntos. Espectacular el lituano que acabó la primera mitad con una jugada impresionante, asistencia de espaldas para triple. La locura en la grada.
Al descanso 48-28. Sólo 28 puntos del CSKA.
En la segunda mitad en cambio, no quisiera haber estado en el vestuario del CSKA, Messina les puso las pilas a los jugadores y por fin empezaron a jugar al baloncesto. Holden dirigió en condiciones (en la primera mitad estuvo muy atascado y falto de ideas, y en la segunda se le vió mñas lúcido y acertado en ataque - 14 puntos - 20 de valoración - M.V.P. de haber ganado CSKA). Y una defensa presionante en toda la cancha, hizo que la ventaja se redujera 10 puntos en el tercer cuarto. El Panathinaikos resistía a base de triples precipitados, destarcar de nuevo a Spanoulis) en los últimos segundos de posesión.
El último cuarto, fue muy bueno, apareció Planinic, que no se parece ni por asomo al que jugó en el Tau, e hizo un trabajo bastante bueno aprovechando su juego al poste, y el gran Siskauskas, despertó, tarde pero lo hizo. Enchufó dos triples impresionantes, que dejaron el partido a un solo punto.
En la siguiente jugada, falta rápida a Jasikevicius con sólo 5,8 segundos por jugarse. Falla el primero y anota el segundo. Dos arriba.
Siskauskas recorre toda la cancha, se juega el triple, pero la bola dió dos veces en el aro y no quiso entrar.
Victoria de Panathinakos 73-71. Con lo que acierto mi pronóstico. +3
Creo que la zona sólo se ha utilizado en una ocasión por parte de ambos equipos, fue CSKA y la jugada acabó con triple de Fotsis, adios a la zona.
El M.V.P. de la final fue para Spanoulis, por su gran inicio y por mantener a Panathinaikos cuando CSKA remontó.
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